No importa cuán malas hayan sido las cosas al final, una vez que una relación finalmente ha terminado, es importante pasar por un proceso de duelo. Si bien las particularidades de estas etapas cambian según la naturaleza y la duración de cada relación, es importante reconocerlas y aceptarlas si deseas avanzar de manera saludable.

Etapa 1: Negación – «Todo fue perfecto»

Todavía es común inicialmente negar que algo haya sido malo y centrarse solo en lo bueno. Esta es una forma de evitar lidiar con la «pérdida». Esta actitud mental puede ocurrir antes de la separación real («esto no está sucediendo», «siempre estaremos juntos», etc.) o puede tener lugar inmediatamente después cuando intentas racionalizar y evitar tus sentimientos de pérdida y rechazo. .

Durante esta etapa, es importante rodearse de personas que se preocupan por ti por encima de tu ex y recordarte a tí mismo que las cosas realmente eran malas. Esto te hace darte cuenta de que la separación, sin importar qué tan doloroso sea, es el mejor curso de acción para ambos.

Etapa 2: Relación de rebote y recaída – «¡No puedo con a soledad!»

Si bien la idea de una relación de «rebote» no es nada nuevo, comprende que esta necesidad de llenar el vacío dejado por tu ex con alguien – cualquier persona – es común y te ayuda a negociar la situación y (con suerte) evitar causar dolor similar a otra persona.

Por otro lado, muchas veces, un miembro de la pareja puede convencer al otro para que «vuelvan a intentarlo». Sin embargo, a menos que estés realmente dispuesto a abordar los problemas que causaron la ruptura, este es un ciclo de enfermedad que solo prolonga tu dolor.

En general, mantener los «rebotes» en el ámbito informal y realmente tomarte el tiempo que necesitas para superar a tu ex es importante para la salud de cualquier relación futura. Si alguna persona nueva que conoces es realmente tan especial, él o ella esperarán hasta que te sientas listo, emocionalmente, para volver a involucrarte.

Etapa 3: Ira – «Odio a todos los hombres/mujeres»

Una vez que has llegado al punto en el que al menos reconoces que tu relación anterior no tenia futuro, la tendencia a bloquear todas las relaciones o esperanzas para las relaciones es comprensible.

Es un mecanismo de defensa que evita que te lastimes de nuevo. Esta mentalidad de «Odio a todos los hombres o mujeres» o «Nunca más amaré» es realmente un esfuerzo de «fingir para seguir adelante y, a tu manera, es saludable.

Etapa 4: Esperanza equivocada

Otro paso en la dirección de «fingir», hacer que no te importen las actividades de tu ex, es un paso importante para separarse mentalmente el uno del otro. Sin embargo, reconoce que, a menudo, decimos esto mucho antes de que sea cierto y tratamos de resistir la tentación de que las redes sociales acosen a tu ex o quede atrapado en su vida sin ti.

Durante esta etapa, tómate el tiempo para volver a centrarte en tí mismo y mejorar o prestar más atención a las partes de tu persona que de otro modo se descuidaron durante tu relación, especialmente durante el final.

Etapa 5: Aceptación.

Esto no sucederá de una vez, y muchas de las tácticas de «falsificar lo que haces» son esenciales para llegar a este punto. Sin embargo, debes comprender, incluso en las primeras etapas posteriores a la relación, que este es el objetivo.

Aceptar no solo el final de tu relación anterior, significa que estás (finalmente) llegando a un punto en el que podrás pasar a una relación con otra persona. Sin embargo, sin descubrir el poder de uno mismo, estás condenado a seguir repitiendo el ciclo de relaciones y rupturas no saludables.

Seguir adelante de una manera saludable.

Recuerda, todos, sin importar quiénes son o cuánto tiempo dura tu relación, pasan por el proceso de duelo posterior a la ruptura. Algunas veces toma horas o días, otras lleva años de trabajo. Así que no te preocupes si reconoces algunas de estas señales y etapas en ti mismo y trabajas a través de ellas al ritmo adecuado para ti.