Es común que una ex pareja romántica sienta que odia a la persona que rompió con él o ella, o que odia a la persona con la que rompió. Exploraremos los sentimientos que algunas personas experimentan después de una ruptura y cómo manejarlos con éxito.
Primero, comenzaremos analizando algunas razones por las que podría importarte que tu ex te odie.
1. Le hiciste daño y te sientes culpable.
Independientemente de quién inició la ruptura, si hiciste algo que provocó la ira de tu ex, es posible que no te sorprenda su reacción. Cada uno reacciona de manera diferente al ser herido por un ser querido, pero si rompiste la confianza de tu pareja, es posible que le lleve tiempo recuperarse lo suficiente como para perdonarte.
Por ahora, puedes intentar aceptar que está enojado(a). Es posible que sientas la necesidad de intentar ser su amigo para sentirte mejor. Sin embargo, es posible que esta no sea una opción útil y puede aumentar sus sentimientos de enojo hacia ti.
En términos de cualquier culpa que puedas sentir, puede ser útil recordar que todos cometemos errores. Es posible aprender, crecer y evolucionar a lo largo de la vida. Si utilizas lo que pasó con tu ex como un momento de aprendizaje, con el tiempo podrás perdonarte.
2. Todavía sientes algo por tu ex.
Es posible que aceptes que no funcionan bien como pareja, pero al mismo tiempo es posible que aún te preocupes por él o ella o incluso sigas amando. Incluso si fuiste tú quien inició la ruptura, puede ser difícil aceptar que tu ex ahora te odia, especialmente cuando no le deseas ningún daño.
Si todavía te preocupas por tu ex, podrías considerar darle espacio para superar sus sentimientos. La razón por la que siente una emoción tan fuerte como el odio puede ser que no ha dejado de amarte por completo.
3. Formas de ayudarte a sanar.
Si te preocupa que tu ex te odie, existen herramientas que puedes utilizar para intentar alcanzar un lugar de aceptación. Una ruptura, especialmente una difícil, puede provocar una variedad de emociones. A continuación te digo algunos consejos que te ayudarán durante este tiempo:
– Intenta no odiar a tu ex.
Puede resultar tentador odiar a tu ex si sientes que el odio proviene de él o ella. Sin embargo, es posible que odiar a tu ex no haga que te odie menos y que no te haga sentir mejor. Aunque no puedes controlar lo que tu ex siente por ti, puedes trabajar en tus propios sentimientos y acciones.
– Ten cuidado con el contacto.
Incluso si sientes algo por tu ex, contactarle puede no ser una buena idea, especialmente si sabes que te odia. Puede que tengas las mejores intenciones, pero las personas pueden actuar con descaro cuando se encuentran en un estado mental negativo.
Además, ponerte en contacto con tu ex puede parecer como echar sal en sus heridas y puede aumentar sus sentimientos negativos hacia ti. Puede haber ocasiones en las que sea necesario contactar a tu ex, pero puede que no sea una buena idea fuera de estas circunstancias. No importa cuánto quieras que tu ex deje de odiarte, es mejor que priorices tu propia salud y bienestar.
– Redirige tu enfoque.
Puede ser fácil reflexionar sobre el hecho de que tu ex te odia. Si hiciste daño a tu ex, puedes incluso creer que sus sentimientos están justificados. Sin embargo, por mucho que quieras castigarte a ti mismo, no puedes cambiar el pasado.
En este punto, puede resultar más útil centrar tu atención en tu propia vida. Podrías prestar atención a las oportunidades, otras relaciones y otros aspectos de la vida que pueden beneficiar tu crecimiento y éxito. Si aprendes a redirigir tus pensamientos, puede que te resulte más fácil seguir adelante y vivir tu mejor vida.
– Tomar medidas significativas.
Para redirigir exitosamente tu enfoque, es posible que debas tomar medidas. Podrías intentar dedicar más tiempo al trabajo, al ejercicio físico o a un nuevo pasatiempo y ponerte en situaciones productivas con personas positivas.
Cuando estás ocupado(a) con actividades significativas o divertidas, es posible que con el tiempo dejes de preocuparte de que tu ex te odie. No importa lo difícil que pueda ser redirigir tu atención, puede ser más útil que preocuparte por lo que tu ex siente por ti.
4. El cerebro, el dolor emocional y la terapia tras una ruptura.
Las investigaciones muestran que cuando las personas ven fotos de su ex, a menudo se activan las mismas partes de su cerebro que cuando experimentan dolor físico. Esto puede deberse a que nuestro cerebro parece procesar el dolor emocional profundo de la misma manera que procesa el dolor físico.
Además, quienes han experimentado rechazo en las relaciones románticas pueden desarrollar “antojos” por sus parejas, de forma similar a como alguien podría desear una sustancia a la que son adictos. Esto sugiere que el cerebro puede estar poderosamente conectado cuando se trata de amor romántico.
PUEDES LEER: Así Es Como DEBES CONTACTAR a Tu Ex Novio
Aquellos que recientemente han experimentado una ruptura difícil pueden beneficiarse del apoyo de un profesional de salud mental autorizado para superar cualquier dolor que estén experimentando.
Incluso si eres tú quien terminó la relación, es posible que también estés sufriendo, especialmente si tu ex tiene sentimientos negativos hacia ti. Tus sentimientos también son válidos y la terapia puede ayudarte a aceptar tu ruptura y a dejar ir lo que ya no está bajo tu control.