Después de una ruptura, es posible que te encuentres en una posición frustrante y confusa, esperando que tu ex “se rinda” y potencialmente quiera volver contigo. Este proceso puede ser agotador emocionalmente, pero comprender la dinámica en juego puede ayudarte a atravesar este momento difícil.
En este video, exploraré lo que suele suceder cuando tu ex finalmente cede y te contacta después de una ruptura.
1. Debes entender su resolución inicial.
Cuando tu ex rompe contigo inicialmente, es probable que esté comprometido a seguir adelante con su decisión. Esta resolución puede ser particularmente frustrante si estás contando los días y te preguntas por qué no te ha contactado.
Es importante darse cuenta de que su decisión de separarse no se tomó de la noche a la mañana. Probablemente hayan pasado semanas o incluso meses contemplándolo, pasando noches sin dormir y luchando con sus pensamientos. Llegó a un punto en el que sintió que necesitaba actuar porque nada estaba cambiando.
2. El papel de la limerencia y el amor de compañía.
A menudo, la gente no se da cuenta de que los sentimientos apasionados e intensos de una relación (conocidos como limerencia) se desvanecen naturalmente con el tiempo.
Las relaciones saludables se transforman en un amor de compañía, que se trata más de una conexión profunda y compañerismo que de una pasión constante. Este cambio puede resultar inquietante para algunas personas y llevarlas a creer erróneamente que sus sentimientos han cambiado de forma permanente y que necesitan terminar la relación.
3. La influencia de los amigos y los grupos de apoyo.
Un factor importante en la decisión de tu ex de seguir adelante con la ruptura puede ser la influencia de sus amigos y grupos de apoyo. Los amigos alientan la ruptura recordándole a tu ex los aspectos negativos de la relación y presionándo para que siga siendo independiente o salga con otra persona.
Esta presión externa puede reforzar su decisión, haciendo más difícil para tu ex reconsiderar volver a estar juntos.
4. El impacto de la presión post-ruptura.
Si has estado presionando a tu ex para que vuelvan a estar juntos, esto puede generarle ansiedad adicional. El contacto persistente, las súplicas emocionales y la falta de respeto por su espacio pueden hacer que sienta mucha ansiedad ante la posibilidad de volver a entrar en la relación.
Esta presión a veces puede hacer que actúe con frialdad o incluso con crueldad como mecanismo de defensa para proteger su nueva sensación de libertad.
5. La importancia del no contacto.
Implementar la regla de no contacto puede ser una estrategia poderosa. Al dar un paso atrás y darle a tu ex el espacio que necesita, le permites extrañarte y reconsiderar su decisión sin sentir presión de tu parte. Esta ausencia puede hacer que romantice la relación y eventualmente se de cuenta de que extraña la compañía y el amor que tenía contigo.
6. Se acerca de forma informal.
Cuando tu ex finalmente se rinde, suele acercarse a ti de manera casual. Es posible que te pregunte cómo has estado o indague sobre tu vida sin mencionar directamente la posibilidad de volver a estar juntos. Este enfoque tentativo significa que no sabe cómo proceder y espera que una conversación natural pueda conducir a una reconexión más profunda.
7. Pregunta sobre tu vida amorosa.
Si tu ex te pregunta si estás saliendo con alguien, podría ser una señal de que está tanteando el terreno. Quizás esté tratando de evaluar tus sentimientos y ver si existe la posibilidad de reavivar la relación. Este enfoque indirecto muestra su interesa, pero sus nervios no le permite decirte.
8. Toma acción directa.
En el mejor de los casos, tu ex podría expresar directamente su arrepentimiento y pedirte que vuelvan a estar juntos. Este enfoque directo es ideal porque elimina la ambigüedad y deja claro que quiere trabajar para reparar la relación. Podría pedirte verse, lo que constituye un paso importante hacia la reconciliación.
9. Reconstruyendo la relación.
Si decides reunirte, es fundamental gestionar esta delicada fase con cuidado. Concéntrate en estar agradecido(a) por la relación y en tratarse mutuamente con amabilidad y respeto. Evita magnificar problemas pasados o sacar a relucir constantemente conflictos. En cambio, concéntrate en construir una relación positiva y de apoyo.
Conclusión.
Navegar por la fase posterior a una ruptura es un desafío, pero comprender estas dinámicas puede ayudarte a mantener los pies en la tierra y tomar decisiones bien pensadas. Recuerda, la paciencia puede ser tu superpoder.
Establece un plazo de tiempo razonable para esperar y ver si tu ex se comunica contigo. Si no lo hacen, tal vez sea momento de seguir adelante y concentrarte en tu propia curación y crecimiento. Espero que encuentres la fortaleza y la claridad que necesitas durante este momento.