Sé indiferente para que tu ex te persiga. Sé indiferente para despertar su curiosidad. Sé indiferente para que salga contigo. Sé indiferente para que su atracción se dispare. Sé indiferente y volverá a amarte y desearte.

“Sé indiferente” es probablemente uno de los consejos más comunes que se escuchan en el mundo de las rupturas. Se ve a muchos charlatanes que dicen que seas indiferentes con tu ex pareja para volver a atraerla.

También se ve a auténticos coaches de relaciones que les dicen a sus espectadores que hagan lo mismo. Y se ve a casi cualquier persona que ayuda a personas con rupturas sentimentales predicando la misma idea: Si quieres recuperar a tu ex, sé indiferente con él o ella.

A veces, «ser indiferente» se refiere a ignorar descaradamente a tu ex y ser una persona fría. A veces se refiere a ser amable pero distante. Otras veces se refiere a desconectarse completamente.

Es decir, independientemente de si tu ex responde positivamente a tu presencia o no, si te responde o no, o si recuperas la relación o no, no muestras preocupación.

No cedes bajo ninguna circunstancia. Pero la cuestión es la siguiente: Ser indiferente a las reacciones, respuestas y opiniones de tu ex, es imposible. De hecho, incluso consideraría disfuncional e idiota intentar ser indiferente.

Por qué intentar ser indiferente ante tu ex es una lástima.

Al ocultar tus verdaderas intenciones e identidad, también ocultas tu yo auténtico. Por lo tanto, si en algún momento vuelves a atraer a tu ex, no se enamoró de ti, sino de tu yo falso: La persona artificial e indiferente que construiste y proyectaste al mundo.

La única razón por la que los sobrevivientes de una ruptura intentan ser indiferentes hacia su ex es porque en el fondo se preocupan demasiado por él o ella. Pretenden que no les importa no haber respondido a su tercer mensaje consecutivo porque les aterroriza perder a está persona para siempre.

Pretenden ser geniales y distantes cuando tienen una cita con su ex porque tienen miedo de arruinar las cosas y no tener otra oportunidad con él o ella.

Fingen que no les importa nada su ex cuando sus amigos les preguntan: «¿Cómo va la recuperación?», solo porque sienten demasiada vergüenza para admitir que están sufriendo, solos y, a veces, incluso miserables. Fingen que no les importa lo que su ex piensa o hace, pero en el fondo sí les importa; les importa intensamente.

La indiferencia no es más que un mecanismo de defensa contra la inseguridad, la vergüenza, el miedo y la vulnerabilidad. No son los indiferentes los fuertes, admirables y seguros de sí mismos; son los indiferentes los débiles, cobardes, incluso egocéntricos y autocompasivos.

De hecho, son el tipo de personas que se esconden perpetuamente en el pozo gris y sin emociones que ellos mismos crearon, distrayéndose de sus verdaderos sentimientos hacia su ex y de su verdadera actitud hacia la ruptura.

Haz caso omiso de los consejos tóxicos.

Todo el movimiento de la indiferencia es una ilusión. Una ideología creada para darte falsas esperanzas de que puedes convertirte en una persona dura e indiferente como en las películas. Ya sabes, el chico o la chica a quien le importa un comino la adversidad. Pero eso es una fantasía. No puedes ser indiferente con tu ex.

Una mejor alternativa a la indiferencia hacia tu ex.

Entonces, si no puede dejar de importarte un comino tu ex, ¿Qué puedes hacer? ¿Qué más puedes hacer para que no te importe nada? Bueno, sí. Sí, puedes. Y es bastante sencillo: Encuentra algo que te importe más que tu ex; algo que anule la importancia y el significado de tu desamor y que haga que tu lucha emocional diaria valga la pena.

Paradójicamente, encontrar ese algo te llevará a ser indiferente hacia tu ex como efecto secundario. Pero esta no es la indiferencia común y corriente que un cobarde practicaría. Es una indiferencia auténtica, no solo sana, sino también necesaria para una vida plena.

Es la indiferencia que uno encarna sin intentar ser indiferente. Ahora, la forma de descubrir qué es ese algo es haciéndote una pregunta simple y luego reflexionando sobre ella: ¿Qué me importa más y es más significativo que mi ex?

Ese algo puede ser realmente cualquier cosa: Ser parte de un movimiento, luchar por una causa, atender a otra relación, mejorar en una determinada habilidad, desarrollar algún hábito interesante o seguir un propósito de vida. Para ser más específico, tu algo puede ser tan clave como la meta que siempre quisiste alcanzar.

Puede ser tan común como el deseo de especializarte en ingeniería informática. Puede ser tan primitivo como el deseo de comprar un deportivo de 500.000 dólares. Puede ser tan altruista como el sueño de dedicar la vida a ayudar a niños hambrientos en África.

Puede ser tan personal como el anhelo de recuperar un atisbo de autoestima perdido en medio de un desamor. Es asombroso e incluso lamentable que tan pocos supervivientes de una ruptura busquen la respuesta a la pregunta de «¿Qué me importa?». Es decir, es relativamente fácil y las ventajas de la tarea superan con creces las desventajas.

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Tu respuesta única no solo te ayudará a volver a atraer a tu ex de forma auténtica, sino que, aún más importante, el simple hecho te ayudará a descubrir lo que realmente te importa y a descubrir lo que no debería importarte. Te ayudará a descubrir tu propósito y quién eres realmente.

Se trata de conocimientos monumentales que trascienden las rupturas y se extienden a todos los ámbitos de la vida. La idea es que solo te importa un bledo. Así que, si sigues dándole importancia a cosas que no importan (como tus zapatos nuevos, la opinión de tus amigos/familiares, tu ruptura, recuperar a tu ex),

Te arriesgas a desbordarte por preocuparte por demasiadas cosas a la vez, y eso acabará destruyéndote mental, emocional e incluso espiritualmente. Así que de nuevo, respóndeme esto, y esta vez piénsalo de verdad: ¿Qué te importa y es más importante y significativo que tu ex? Ahora ve y persigue eso.