Mientras estés en el período sin contacto, e incluso una vez que ese período haya finalizado, debes usar tu cabeza y no seguir a tu corazón. ¿Por qué? Porque lo más probable es que te arrastres a cometer uno de estos «pecados de relación». ¿Por qué es tan malo? Porque saboteará totalmente tus esfuerzos para recuperar a tu ex.
Estos pecados son los errores más comunes que cometen la mayoría de hombres y mujeres después de la ruptura. Simplemente no pueden evitarlo. Espero que al hacerte consciente de los escollos más comunes podrás evitarlos mejor para que puedas permanecer en el camino correcto.
Estos son los pecados más comunes después de la ruptura que cometen la mayoría:
Pecado 1: Contactar a tu ex todo el tiempo.
La regla de no contacto básicamente cubre esto. Pero, es tan fundamental para el éxito de recuperar a tu ex que tiene sentido reiterarlo. Anteriormente, explicamos cómo el mantener tus emociones bajo control es fundamental para que este período de no contacto funcione. Sé lo fácil que es retroceder y caer en nuestros patrones familiares.
Siempre se te ocurrirá alguna razón por la que tengas que contactar a tu ex. Viste unas zapatillas que le encantarían, es su cumpleaños, es el cumpleaños de su perro, y así sucesivamente. ¡Pero debes resistirte! Date cuenta de lo que realmente está sucediendo, no hay nada urgente que debas decirle a tu ex, solo quieres hablar porque lo extrañas. Pero recuerda que llegar a esta etapa no lo devolverá a tu vida.
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2. Suplicarle que vuelva contigo.
Para decirlo sin rodeos, rogar a alguien que vuelva contigo no funciona y, en cambio, te hace ver patético. Apestas a desesperación y será totalmente contraproducente en tu intento de recuperar a tu ex.
Si estás en el punto en el que suplicar a tu ex que te quiera parece una opción viable, tómate un momento y observa de dónde viene ese impulso. Lo más probable es que te estés creando fantasías poco realistas sobre cómo sería tener a tu ex de vuelta, y estás esperando desesperadamente que la realidad sea diferente de lo que es ahora.
3. Soportar su mal comportamiento, dejar que tu ex haga lo que quiera.
Soportar el mal comportamiento de alguien nunca es bueno. Pero, si crees que tu ex fue lo mejor que te pudo pasar y quieres que vuelva contigo, es posible que sientas la tentación de aceptar algún tipo de mal trato por parte de tu ex. Puedes engañarte pensando que cualquier atención es buena. Pero ese no es el caso, especialmente si tienes la intención de recuperar a tu ex.
Cuando aceptas el mal comportamiento de tu ex, esencialmente le estás diciendo que él, o ella, tiene el control, y que tu no vas a ir a ningún lado, ni te vas a mover, lo que significa que no hay razón para que vuelva a estar contigo. ¿Por qué debería hacerlo cuando ya te «tiene»?
Desafortunadamente, todo lo que logras con esto es hacerle perder el respeto por ti y verte con tanta desesperación, lo que socava aún más la relación y alejas a tu ex aún más de ti. Inevitablemente, se convierte en un espiral descendente que continúa hasta que la relación implosiona inevitablemente.
4. Asfixiár a tu ex con cariño.
Bañar a tu ex con afecto tiene el mismo efecto que los primeros tres pecados mortales. Tratar de convencer a tu ex de que debería estar contigo prestándole toda la atención, vertiéndole cumplidos, enviándole notas de amor o lo que sea que no funcione. La única forma en que tu ex se convencerá de tu valor es si te haces una persona valiosa, no si te menosprecias y actúas por desesperación.
Puedes pensar que estás siendo dulce, pero estos actos están lejos de ser románticos. Tienes que respetar su espacio después de una ruptura. Si no lo haces, él, o ella simplemente se sentirá desanimado por ti, y se sentirá aún más seguro de que hizo lo correcto al romper contigo.
No puedes convencer a tu ex de que quiera estar contigo asfixiándo. Tu vas a «convencer a tu ex» siendo una persona de gran valor que tiene una energía radiante y positiva, que simplemente atrae a las personas. La desesperación repele, la felicidad y la satisfacción es lo que te hacen un imán de amor, por no mencionar un imán de personas.
5. El pecado de tratar de hacerle sentir celos hablandole de tus citas.
Tratar de hacerle sentir celos haciendo alarde de tus otras citas en su cara tampoco es una buena idea. De hecho, hacer eso también te hace parecer una persona desesperada, por no mencionar manipuladora. Créeme, tu ex puede darse cuenta de esas tácticas… y como ya te dije antes, tratar de convencer a alguien no funciona.
No solo no funciona para recuperar a tu ex, sino que pierdes una parte de ti mismo en el proceso, ¡esa parte es tu dignidad! Y si hablamos de celos, también debes tratar de abstenerte de reaccionar si tu ex publica una foto comprometedora.
Los celos son poco atractivos y destructivos. Tal vez te duela, pero atacar a tu ex no va a hacer que el péndulo se mueva a tu favor. Y realmente no sabes lo que está pasando. Tal vez sea una relación de rebote, tal vez esa persona se un familiar, ¿quién sabe y a quién le importa? En esto no deberías estar poniendo tu atención en este momento.
6. Usar la compasión para recuperar a tu ex.
Usar la compasión para recuperar a tu ex es tan efectivo como mendigar por su amor. ¿Por qué tu ex querría estar con una persona asi? La pena no es atractiva en lo más mínimo. Cuando logras que alguien te tenga lástima, esencialmente le das tu propio poder para elegir el futuro que quiere para ti. Estás a merced de sus sentimientos, estados de ánimo y decisiones.
No existe nada sexy en usar la compasión. Todo lo que harás es hacerle sentir culpable, o harás que el amor que aún podria sentir por ti se enfríe y se aleje de ti. Al volver con tu ex, aumentas tus posibilidades de éxito si viene de la fuerza que le pones, no de debilidad.
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7. Tratar de hablar con tu ex sobre sus sentimientos, o sobre la relación.
Tratar de evaluar las cosas después de una ruptura preguntándole sobre sus sentimientos es peligroso. ¿Te sientes fuerte para escuchar algo que no quieres escuchar?. Deja que las cosas se desarrollen naturalmente. Es más poderoso cuando las personas se dan cuenta de lo que hacen y actúan por libre albedrío, en lugar de por obligación.
El hilo común que sostiene estos siete pecados mortales es la necesidad. La necesidad es el estado mental que fomenta todas las acciones anteriores. Creer que tu ex es la fuente de tu felicidad, el sentido de tu bienestar y/o autoestima, es el tipo de pensamiento que te hará arrastrarte y suplicar por tu ex.
Además de dañar tu dignidad personal, los intentos de forzar tu voluntad o de forzar a otra persona a hacer, decir o actuar de la manera que tu quieres, es manipulador y contraproducente para tus resultados, ya que elejará a tu ex. Siempre es mejor dejar que tu ex llegue a sus propias conclusiones sobre ti, y la relación.