Cómo establecer límites con tu ex. Después de hablar con expertos en la materia y agregar algunos ajustes, filtramos una lista de 9 límites que considero esenciales establecer después de una ruptura. Muy bien, ¡comencemos!

1. Aceptar el concepto de interdependencia.

A menudo, las personas que tienen una relación de tipo codependiente tendrán dificultades para establecer límites. Por eso, habló mucho sobre aceptar el concepto de relación interdependiente.

Por lo general, cuando le pregunto a alguien: «Oye, define una relación codependiente para mí», van a hablar mucho sobre cómo existe esta relación disfuncional en la que una persona da todo en una relación y la otra se aprovecha continuamente de ella.

Entonces, lo opuesto a la codependencia no es la independencia. Lo opuesto a la codependencia es la interdependencia. Cuando estamos en una relación interdependiente, significa que ambas personas están ahí el uno para el otro y ambas personas tienen un sentido de identidad dentro de la relación.

Ambas personas no se necesitan todo el tiempo. Tiene que haber un cierto elemento de necesidad de una persona en tu vida, o si no, ¿cuál es el punto? Simplemente están viviendo vidas paralelas en lugar de interdependientes.

El marco de referencia que se necesita tener cuando se analiza una relación interdependiente es que las personas caen en la falsa creencia de pensar que todo lo que necesitan para completar su vida es otra persona.

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Piensas que falta una parte de ti, y si pudieras encontrar a esa persona para ti, esa parte que falta se llenará, y no es así. Las mejores relaciones se forman cuando personas a las que no les falta ninguna pieza, seguras, llenas de sí mismas y autosuficientes, entablan relaciones entre sí.

Y luego se ayudan mutuamente, pero no dependen totalmente el uno del otro. Ese es esencialmente el primer cambio de paradigma que creo que debes realizar, especialmente cuando se trata de tu ex.

2. Aprende a identificar los signos de codependencia.

Desde mi punto de vista, una proporción significativa de personas que buscan mi ayuda, exhiben estilos de apego ansioso. Con frecuencia se enriedan en relaciones codependientes. Aunque muchos dudan en reconocer este hecho.

Un aspecto crucial al abordar este problema es discernir si tu encajas en esta descripción. Entonces, ¿cómo puedes saber si estás en una relación codependiente? Existen varios indicadores reveladores:

Estilo de apego ansioso.
Naturaleza reactiva.
Incapacidad para conceder espacio.
Resistirse a su independencia.
Dificultad para establecer límites.

3. Establecer la regla de no contacto sobre ti.

Casi no hace falta decirte que el límite principal que debes establecer con tu ex es un período de no contacto. Se cree que después de una ruptura, es esencial imponer un límite de no contacto. Esto le da a tu mente el espacio para recalibrarse y restablecerse.

Si bien es normal querer recuperar a tu ex al inicio del período sin contacto, es mejor retrasar esta decisión hasta el final de esta fase. Para entonces, la lógica, más que la emoción, guiará tu toma de decisiones.

Me gustaría agregar que la regla de no contacto debería servir principalmente a tu bienestar. Si bien algunos adoptan esta regla con la esperanza de que su ex le extrañe, esta expectativa conduce a la decepción. Los que lograron recuperar a su ex utilizaron el período sin contacto para seguir adelante y evolucionar.

4. No rompas la regla de no contacto.

Existe una marcada diferencia entre establecer el límite de «No me comunicaré con mi ex después de esta ruptura» y «No me comunicaré con mi ex durante los 45 días posteriores a la ruptura». Cuarenta y cinco días es bastante tiempo y pueden suceder muchas cosas durante ese tiempo.

Es común sentir la tentación o la necesidad de romper la regla de no contacto. Sin embargo, romper esta regla ocasionalmente es comprensible. Lo malo surge cuando se inicia la regla de no contacto, se rompe, se restablece y luego se vuelve a romper. Esta inconsistencia le indica a tu ex que no puedes mantener límites.

5. No te obsesiones con las redes sociales de tu ex.

Sabemos por la ciencia y los datos que cuando estás pasando por una ruptura, tus niveles de cortisol aumentan significativamente. Durante un período sin contacto, tu objetivo suele ser reducir el cortisol porque si permanece elevado, podrías luchar con los efectos de la ruptura hasta seis meses. No quieres eso.

El desafío es que cualquier cosa que te recuerde a tu ex o te cause celos u obsesión puede aumentar tu cortisol. Las redes sociales son un arma de doble filo en este contexto. Puede ser una herramienta increíblemente útil si buscas reconciliarte con tu ex.

Sin embargo, puede ser perjudicial si revisas constantemente las actualizaciones de tu ex y te obsesionas con sus actividades o posibles nuevas relaciones. Desde un punto de vista psicológico y neuroquímico, este comportamiento sólo sirve para aumentar el estrés.

Es vital que establezcas este límite, especialmente si tiendes a obsesionarte o si estabas en una relación codependiente y quieres con desesperación un reencuentro. Mi recomendación es dejar de seguir a tu ex, no dejar su amistad, pero no veas sus perfiles.

6. Escucha a tu cuerpo.

Este consejo puede parecer obvio, pero tu cuerpo te indicará cuándo estás listo o lista para algo y cuándo no. Una situación que me viene a la mente tiene que ver con las citas posteriores a la ruptura. Crear una sensación de pérdida y parecer que estás siguiendo adelante puede ser beneficioso.

Esto podría significar tener citas. De hecho, la ciencia respalda que tal estrategia puede ser efectiva. Sin embargo, considera esto: si estas citas te hacen llorar, es una señal clara de tu cuerpo de que no estás lista o listo para hacerlo.

Es posible que sientas que simplemente estás cumpliendo las formalidades, cuestionando el propósito de todo. Si así es como te sientes, está bien. En pocas palabras, si tu cuerpo te sugiere que necesitas un fin de semana tranquilo, concédete ese lujo.

7. Aprende a pedir claridad.

Supón que no te encuentras en un período de no contacto y pasaste a la fase de mensajes de texto. Ahora, imagina que tu ex te envía un mensaje de texto diciendo que te extraña. ¿Cómo deberías reaccionar? La respuesta adecuada es buscar claridad.

Por ejemplo, si tu ex te envía un mensaje como «Te extraño», puedes responderle con un reconocimiento, como «Gracias por decir eso». ¿Qué quieres decir con eso?» De manera similar, si comenta lo bueno que es saber de ti, podrías responder con “Te lo agradezco. ¿Por qué lo mencionas ahora?

Establecer este límite es especialmente beneficioso si crees que tu ex tiende a explotar tu generosidad, como suele ser el caso en las relaciones codependientes. Este comportamiento podría manifestarse como una búsqueda de apoyo emocional sin reciprocidad.

Por ejemplo, podría recurrir a ti para pedirte consejo sobre nuevas relaciones o problemas personales, aprovechando tu disposición para ayudar. Luego, una vez que ha recibido el apoyo que buscaba, rápidamente pasa a su siguiente interés.

Este comportamiento puede compararse con ciertas tendencias narcisistas, donde los narcisistas prosperan con un suministro continuo de atención. Poseen una extraña habilidad para decir precisamente lo que se necesita para atraerte, como «Te extraño» o «Te amo». Ante esto, es fundamental pedir siempre claridad para comprender sus verdaderas intenciones.

8. Aprende a defenderte.

Una pregunta sobre cómo establecer límites con amigos y familiares cuando te presionan para casarte o tener hijos, especialmente cuando estas no son tus prioridades inmediatas. La respuesta es decir algo como lo siguiente,

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“No tome ninguna decisión al respecto. Te informare cuando lo haga. Mientras tanto, ¿podrías abstenerte de preguntar? Esto ejemplifica el principio de defenderte. Muchos de los que enfrentan tales presiones, especialmente en lo que respecta al matrimonio y la familia, son mujeres.

La sociedad a veces le impone a las mujeres la expectativa de mantener la paz, expectativa que no siempre está alineada con sus mejores intereses. A veces, lo más sabio es hacerte valer. Sin embargo, es esencial ser asertiva sin ser grosera.

9. Al establecer tus límites se cordial.

“Puedes establecer límites de forma compasiva. Muchos de nosotros, intentamos no parecer groseros. Nunca tengo la intención de herir sentimientos, pero tampoco quiero comprometer mis valores y mi comodidad. Se trata de equilibrio.

¿Cómo estableces un límite que considere tanto tu comodidad como los sentimientos de la otra persona? Siempre piensa en la percepción del otro, lo que te lleva a poner límites con más empatía. Por eso recomiendo establecer límites que sean a la vez claros y compasivos”.

El desafío radica en transmitir tus límites con compasión, sin alienar a los demás. Especialmente con las ex parejas, donde las emociones son intensas, un toque delicado es primordial.